La barbarie tiene que ver con un alto grado de incultura, no propio de la modernidad, es algo que los políticos de todo signo no han incorporado a su acervo cultural, es una cuestión que pensada en función del otro, en el cuál siempre dicen pensar y defender, da cuenta de las falacias que todos ellos esconden en sus discursos de campaña.
El Carril del Metrobus Quilmes, a ser inaugurado el Domingo 2 de junio, ya cuenta con el “sponsor” de los pre-candidatos del Peronismo y de la Agrupación 14 de Agosto, que han pegado sus carteles a todo lo largo del carril, especificamente en las columnas de alumbrado, nuevas y recien pintadas.
Una barbarie que pagamos todos con nuestros impuestos, porque los responsables de mandar a realizar semejante pegatina ni siquiera son multados, menos las Agrupaciones Políticas, simplemente porque ningún Concejal tiene lo que debe tener en su lugar como para legislar al respecto.
Votar a estos candidatos que no respetan la obra pública, que no les importa hacer daño a un patrimonio que no es de ellos, sería dañiño para todos, porque demuestran con su accionar, que no tienen la capacidad de medir los daños que causan al Estado Municipal y a sus contribuyentes y que ellos no se hacen responsables de nada.
Ya esta pasando en Florencio Varela, dónde se comenzo a pegar carteles en plena peatonal y tampoco a nadie le importa, las cámaras de monitoreo en el lugar “no ven” y la cantidad de policías que circulan allí, no actúan por temor, aunque se trate de un delito catalogado como “daño al patrimonio público”. Eso si, que no vayan a tocar el monumento a las Madres de Plaza de Mayo, porque todos se van a alterar y a repudiar el hecho mediante Proyectos Payasescos de Resolución, aunque no tuvieron la capacidad de pedir se le retire una mención San Juan Bautista a quién incitaba a la violencia por las redes sociales, al ser una astilla del propio palo.