El pseudo Peronismo, Kirchnerismo, Cristinismo o Albertismo, como lo quieran llamar, no es más que un partido de pocos que se han hecho millonarios a todo nivel con las exacciones que han realizado a todo en todo tiempo del Estado Argentino. No hay en política económica nada nuevo bajo el sol, la recaudación no es suficiente y sin embargo no se limitan los gastos del Estado, en lo que refiere a Diputados, Senadores y funcionarios públicos.
El problema de la carne, con respecto a los precios que el gobierno impone, hace que los intermediarios vendan al público cualquier cosa y que los cortes económicos aparezcan poco -caso de las milanesas-, los mercados COTO casi no cortan y el asado o el vacío tiene un desperdicio importante de grasa, de la carne picada ni hablar es 40% de grasa y el resto carne, cuando se cocina no queda nada.
Sin embargo hay cortes más caros, si uno puede pagarlos y quiere comer mejor, pero no es culpa del campo, el Presidente debió mirar primero cuanto vale el ganado en pie y cuanto al salir del frigorífico, no lo hizo, sigue mal asesorado, entonces se enoja, amenaza y genera incertidumbre y broncas, pero después se arrepiente y llama a una mesa de dialogo.
Se da cuenta tarde que si aumenta retenciones o vuelve a poner cupos a la exportación de carne o granos, el campo en general se le va a parar de manos y con un solo paro que le hagan de una semana, los precios no los va a contener nadie, la perdida de mercados tampoco y el ingreso de dólares caerá, lo que lo va a llevar a un camino sin solución.
En casi todo lo que se hace hay un complicado camino que no alcanzan a vislumbrar y nos van llevando poco a poco a una inflación mayor que ya no pueden controlar, máxime al aumentar el precio de los combustibles y hacerle perder valor al peso con la suba constante centavo a centavo del dólar oficial y la nueva emisión monetaria.
Estamos en una “nueva normalidad” sin vacunas suficientes y sin la productividad esperada, con miles de comercios cerrados muchos de ellos definitivamente- y con mayores transacciones por las redes sociales.
Hay que reconocer que algo lograron se esta sustituyendo un modo de compra -venta y se evaden impuestos a todo nivel, en especial en corralones de materiales de construcción, pero a nadie de AFIP o ARBA se le mueve un pelo, por otra parte quienes deben proveernos de vacunas, nos desconfían y piden pagos anticipados y al contado, por tanto la palabra del “presidente” no tiene valor ni respaldo.