En la Argentina, se asustan que en la República de Italia se voto mayoritariamente por un gobierno de derecha, que no es necesariamente volver al fascismo de Benito Mussolini, ya que las nuevas derechas han aprehendido de sus errores históricos y seguramente se dedicaran a proteger con mayor fuerza que la izquierda -que estaba hundiendo a Italia- a su territorio como a sus habitantes, los que por primera vez votaron en un alto porcentaje.
No cabe duda que allí los sindicalistas como los Moyano, los que paralizan las plantas de neumáticos en nuestro país o los que junto al gobierno de Alberto Fernández, hicieron que “Mercado Libre” se vaya a operar en Uruguay, que una empresa láctea de la que vive todo un pueblo, esté paralizada por el accionar mafioso y delictivo de estos delincuentes, que lograron hacer despedir a 29 empleados no confiables que ayudaron a paralizar esa planta y otros muchos que copian estas formas delincuenciales como lo hacia el titular de UOCRA La Plata, con el fin de lograr sus objetivos, allí no van a tener cabida.
Parte del mundo gira a la derecha, Inglaterra fue con una Primer Ministro, Italia le sigue y en 2023, será Argentina, donde claramente la Justicia para los casos aqui mencionados no actúa, tampoco lo hace el Ministerio de Trabajo quitandoles las personerías gremiales, porque en el fondo son sus aliados políticos.
Asi tenemos sindicalistas millonarios, con la plata de sus afiliados -igual que los que presiden clubes de fútbol que terminan fundidos, desde la política – en ningun nivel legislativo nadie hace nada, no se modifican leyes y no se declara la incompatibilidad entre la función gremial y la de legislador y asi los tenemos también encaramados en la función pública, donde legislan para su propia conveniencia o se venden al mejor postor y operan desde un lado y otro del mostrador.
Estas situaciones se dan en gobiernos populistas de Centro Derecha como lo fue el de Perón que los fortaleció por conveniencia, copiando al Corporatismo Fascista de Benito Mussolini, de quién era un claro admirador.
Hoy nuestro país tiene un gobierno ideologícamente situado en una izquierda populista, con un sesgo autoritario de derecha que busca controlar todo y se arrima a esta clase de sindicalistas, por temor y por falta de capacidad para ponerles freno, pero a su vez van contra las empresas que son sostén de un país y de su propio gobierno, a las que también les cortan las importaciones necesarias para su producción e hipócritamente, les piden invertir en el país y generar empleo, logrando con sus acciones todo lo contrario, además de un encarecimiento de los insumos que deben llegar sin problemas a cada habitante del país.
Argentina solo encontrará nuevos rumbos, con un cambio total de gobierno, donde se respeten las normas de convivencia ciudadana, funcione la Justicia y se termine con la delincuencia y la corrupción generalizada, aunque quizás algunos de nosotros no lo lleguemos a ver y a otros no les guste, ya estamos transitando ese camino.