
Ante el endurecimiento del cepo al dólar por medio de las tarjetas de crédito que evita sacar en el exterior más de 50 dólares, la baja en la tasa de interés de las Leliqs con el fin de ampliar los pesos en circulación, la baja en el interés que los bancos generaron en esta última semana sobre plazos fijos en pesos que alcanza al 53 % anual y al 45% anual en algunos bancos y no llega a cubrir la inflación por venir en plazos fijos a 30 o 60 días, aumentando en consecuencia el mercado del dólar BLUE que alcanzó a cotizarse el 1º de noviembre a $ 67,50 para la venta al público y a $ 65 para la compra, los clientes de los bancos siguen retirando sus plazos fijos y/o comprando los U$S. 200 que les permite la AFIP vía las cuentas corrientes dónde pasan sus depósitos en pesos.}
Estas compras en menor escala, representan un importante monto en dólares que sigue mermando las reservas del banco central, cada vez que el comprador retira sus dólares del banco, al persistir la desconfianza y la incertidumbre sobre las medidas que tomará Alberto Fernández a partir de que asuma la Presidencia de la Nación Argentina.
Ya el mismo ha dicho que los tiempos que vendrán serán “duros” aunque no para él, sino para la población argentina en general y en especial para la clase social más carenciada.