Varios Intendentes del oficialismo comenzaron a mostrarse (para la foto) controlando precios en Supermercados, en especial Mayra Mendoza en Quilmes o en Florencio Varela, enviando gente a realizarlos.
Ya con antelación lo habían hecho Concejales y militantes políticos y en la realidad no dio resultado alguno, solo son medidas intimidatorias que no llegaron a nada visto que los precios siguen una línea ascendente.
Fijar precios máximos en una cadena de comercialización final, que no es la productora principal de alimentos u otros insumos humanos, lo único que hace es generar consecuencias que van a afectar al consumidor porque esos supermercadistas dejaran de comprar muchos productos que no se puedan ajustar a los precios fijados por el Secretario de Comercio Interior Roberto Feletti, dejando al consumidor sin posibilidad de elegir.
Cuando un gobierno mantiene impuestos distorsivos y aplica normativas sobre la Macroeconomía, comete el peor de los errores, por eso suben los precios de los insumos, la gente corre al dólar marginal y el Banco Central sigue perdiendo reservas.
Las consecuencias de estas medidas: Mayor pobreza e indigencia, desempleo, desabastecimiento al corto plazo y mayores protestas sociales, con un claro debilitamiento de la gobernabilidad.
A todo ello hay que agregar que no cierran las negociaciones con el FMI, no piensan abonar la deuda y suenan vientos de cambio de Ministro de Economía, presuntamente sería Feletti por Guzmán, cuestión que les va a complicar algo más que una elección legislativa que ya se da por perdida.