No solo están en el aire las amenazas de D’Elía y otros, llamando a sus militantes pagos a tomar la calle contra la Justicia y en defensa de una Vicepresidenta considerada la Jefa de una Banda que le robo a las arcas del estado, mediante el apriete a diversos empresarios que ejecutaban Obras Públicas a nivel país, acción que comenzó el fallecido Néstor Kirchner y que siguieron como ejemplo varios “Varones del Conurbano Bonaerense” (Intendentes), los que alguna vez denunció el mecionado D’ Elia y muchos otros que hoy bien pagos, se desdicen y defienden lo indefendible, buscando generar el caos social.
Son típicos sediciosos que no miden las consecuencias de sus actos, si se producen enfrentamientos y muertos, cuestión de la que, visto los animos de mucha gente, da indicios de que se esta en una etapa peligrosa para utilizar este tipo de recurso que no tiene validez alguna, cuando las defensas se ejercieron en los tribunales superiores y aún quedan recursos judiciales, si hay condena.
Esta etapa peligrosa se acentúa a medida que pasan los días y grupos piqueteros de izquierda que no logran sus objetivos amenazan con mayor convulsión social, máximizando el peligro un Ministro de Economía que hasta ahora coloca un parche tras otro, perjudicando a los que menos pueden y a una clase media que ya no llega a fin de mes o lo hace a duras penas.
La situación de los grupos más vulnerables, esta siendo aprovechada por sus propios líderes quienes ya presionan a Supermercadistas de la Provincia de Buenos Aires, el Gran Rosario y, parte de Córdoba, para que entreguen bolsas de alimentos o navideñas, de no lograrlo con estas presiones, volverían a tomar supermercados y a robarles las mercaderías que tengan más a amano, por ello ya muchos de ellos han reforzado sus custodias con personal policial contratado, aunque si se dan hechos de esta magnitud, se carece de una Policía que pueda actuar rapidamente y hacer cesar los desmanes que pudiesen llegar a producirse.
Quizás la manera más fácil es detener a los cabecillas de cada zona que están pensando en incitar a los saqueos, en el momento previo a estos acontecimientos, sin hacer distinciones de ninguna clase, sean sindicalistas o no.
El problema del hambre que muchos padecen no es causado por el comerciante, sino por políticas de Estado mal implementadas y por la falta de creación de fuentes de trabajo, a lo que se agregan una inflación que no se puede controlar y una devaluación diaria de nuestra moneda, que empobrece cada vez a mas personas, sin embargo y en medio de esta crisis el Presidente Alberto Fernández se da el lujo de comprar un avión “presidencial” que no va a costar más de 25 millones de dólares, teniendo en cuenta que se pagara mediante la financiación de la Corporación Andina de Fomento, organismo que aplicará los intereses correspondientes.