La candidatura de Alberto fernández lanzada por las redes sociales, en realidad no tiene validez alguna, no esta “oficializada” y reconocida en la lista respectiva, por el Juzgado Electoral, pero supongamos que tenga validez legal, de ser así, el Alberto que se ha dado vuelta políticamente para todos lados, comenzó mal.
Sus declaraciones como futuro Presidente, si es que fuese votado, en lugar de intentar cerrar la grieta, la abre y profundiza cada vez más, primero con las declaraciones amenazantes sobre los Jueces que deben rendir cuentas, después por una presunta reforma constitucional que no le sería nada fácil y por último con la reforma de las funciones del Consejo de la Magistratura.
En la realidad está en la misma sintonía que lo escrito en el libro de Cristina Fernández viuda de Kirchner, hoy sentada en el banquillo de los acusados por corrupción en la Obra Pública, una foto que no esperaba.
Alberto Fernández, no es más que un ambicioso de poder que logro convencer de alguna manera a Cristina de declinar su candidatura a Presidenta, evitandose asi miles de problemas en un país que que quedaría financieramente mal, aunque con mucha obra pública terminada o a terminar, la jugada estratégica es de ella, que sigue aferrándose al poder.
La embarra aún más cuando indica que el mayor problema es la deuda externa con el FMI, indicando claramente que habría una suspensión de pagos y una revisión del acuerdo, deja fuera a los inversores privados, los que iniciarían nuevamente juicio al Estado Nacional.
Esta claro que al gobierno actual no le va nada bien, porque más allá de toda la inversión pública que realiza, no logra mayor inversión directa extranjera, no genera mayor empleo y no puede bajar la tasa de interés porque se le escapa el dólar hacia arriba. Tampoco logra posicionarse políticamente y Macri sigue cayendo en la opinión pública y no por la fórmula Fernández – Fernández, sino por seguir un sistema comunicacional que no le es efectivo.
Si bien los mercados no tomaron muy en serio la fórmula presentada, porque ellos siguen en la “timba”, estan a la espera de su concreción en los papeles y lo mismo muchos inversores privados. Julio y Agosto serán definitorios en las decisiones a tomar, si gana en las PASO la fórmula presentada, lo primero que sucederá, será el retiro de dólares de las cuentas bancarías, lo que obviamente afectaría al gobierno de Macri, pero daría cuenta que ni los mercados ni los inversores grandes o pequeños, creen en una Cristina Fernández de Kirchner moderada, ni tampoco en que Alberto Fernández tendrá el poder de decidir por si solo, como lo viene diciendo.