Parece que el pasado como Ministro de Economía de la Nación de Axel Kicilof, hoy gobernador de la Provincia de Buenos Aires y su doctorado en Economía, no le sirven para encaminar su gestión de gobierno y achicar en lo posible el gasto público, como no le sirvió para no endeudarnos con el Club de París, sino que la ambición de buscar una posible reelección de su cargo actual al seguir alineado a Cristina Fernández y a Máximo Kirchner y su debilitada estructura de La Cámpora, lo llevan por el camino contrario.
El camino contrario es la falsedad con que se maneja, diciendo “que la Provincia esta en una situación a punto de explotar, pidiéndole al FMI que no ajuste” y al Presidente Fernández, entre líneas que no tenga miedo de enfrentarse a los poderosos, ayudando a que se debilite más de lo que esta y en línea con los Kirchner que buscan debilitar aun mas al presidente persistiendo en lo que ellos mismos, en otras oportunidades, han denominado “golpe blando” con la finalidad de no de asumir el poder del Estado, buscan colocar a otro títere que sería el ambicioso de Sergio Tomás Massa.
La hipocresía es pedir que no se realicen ajustes y agrandar el Estado Provincial con la creación del nuevo Ministerio de Medio Ambiente, un gasto innecesario que va a generar mayor déficit fiscal y por tanto menor capacidad de recuperación.
Cuando no se tiene buena gestión, todo se cubre con mayores gastos, como mostrar que se hace y en la realidad, se complejiza mas la situación económica actual, no solo la provincial, sino a nivel nacional, no es momento de agrandar el Estado y el gasto público, sino de adecuarse a la realidad actual y esta los esta pasando por encima.