Esta vez le toco a la esquina de Presidente Arturo Illía y Avenida Novak, todavia no fue el Intendente Municipal a inaugurarlas. Ayer las colocaron y ya están en funcionamiento.
Es necesario recaudar y a eso se apunta siempre, aprovechan que las Provincias no delegan poderes sobre las rutas provinciales, ni en las jurisdicciones municipales -salvo en Rutas Nacionales- y de esta forma la Ley de Transito se aplica para algunas cuestiones y para otras no.
Por tanto, la Provincia y los Municipios en sus jurisdicciones pueden colocar las camaras que quieran con la excusa de la seguridad del tránsito. La provincia y pocos municipios colocan carteles de “Control de velocidad” cien metros antes de cada cámara de fotomultas y los carteles indicadores de las velocidades máximas.
En los casos como el presente, estas cámaras son para multar a quienes crucen con el semáforo en rojo, aunque este no tenga el contador respectivo.
Muchos que desconocen esta nueva ubicación, son atrapados cuando el semáforo pasa del amarillo al rojo. La multa puede ser pagada voluntariamente cuando llegue o bien tratar de recusarla ante el Juzgado de faltas que corresponda.
Más allá de la función recaudatoria o de “ordenamiento del tránsito”, lo ideal sería que inviertan en Seguridad Jurisdiccional colocando lectores de patentes de forma tal que genere un circuito cerrado y se puedan evitar los robos diarios de automotores en Florencio Varela y que por otro lado se mantengan en resguardo los videos de la camaras de monitoreo y no se borren cada mes -como nos indicaron que se hace- porque desaparecen con esta acción, muchas evidencias que pueden servir a la Justicia, cuando investiga algún hecho delictivo.