Difícil llegar a analizar y compara a todos los autores que menciona Milei, de lo que se trata es de aplicar mis conocimiento en economía, para poder explicar en forma no académica al público lector cual es el pensamiento del Presidente argentino y sus objetivos.
Dice Milei: No se puede explicar el crecimiento económico sin involucrar el capital humano y el progreso tecnológico aunque este ultimo conlleva a la destrucción de otros mercados y fuentes laborales , involucrando hasta aquí la fórmula de varios economistas a los emprendedores, no a empresarios (que son las claves del sistema económico del libre mercado).
Cuando en el análisis neoclásico aparecen “las fallas del Mercado” surge el Estado para corregirlas, aparece el intervencionismo y los impuestos, la regulación de los monopolios y de los bienes públicos, no hay exclusión ni rivalidad o competencia. Esa intervención al no tener toda la información no resuelve el problema, lo agrava y nos lleva a la “servidumbre”
N. de la R.: Si contrastamos la realidad económica solo imperante desde el año 2003 en adelante, la ampliación del Estado y su mayor intervención en todas las áreas de la economía, vino hundiendo cada vez más al sector agropecuario, al punto tal de que bajo en demasiada la cría de vacas para consumo interno, en el sector lechero, desaparecieron miles de tambos y en el sector agropecuario se variaron las cosechas hacia la soja que permitían generar mayor valor, con costos dañinos al medio ambiente por los desmontes generados en varias provincias, los que aún continúan, cerraron cientos de PYMES, cayo de nivel la clase media, se reprimieron precios de bienes y servicios de todo tipo, se permitió el ejercicio de la minería contaminante a cielo abierto, cayo el empleo y se genero mayor pobreza, ante esto el Estado emitió para “cubrir las supuestas fallas del Mercado”, dar planes sociales y generar empleo estatal deficiente y con aumento del gasto fiscal, con esa idea generaron una economía cerrada (endógena) sin salida al mundo, pusieron cupos a exportaciones y cerraron importaciones, cayeron en un Estado Socialista anticapitalista, con una economía endógena que no aumento el PBI ni los salarios, como tampoco genero mayor empleo, sino que bajo esa metodología distribuyo el ingreso en una población que aumenta cada año, mediante planes sociales, generando más problemas: trabajo precario en negro, insuficiencia para cubrir gastos básicos alimentarios y gran déficit fiscal, con emisión monetaria incontrolable que llevo a la inflación de 2023/ primero meses de 2024. Desapareció el ahorro que propiciaba Adam Smith y el Capital de inversión productiva, aunque apareció una corrupción generalizada.
Claramente el método Socialista de un Estado más grande, genero una economía con menor crecimiento, al haber coerción sobre la propiedad privada, es decir sobre el dinero que uno tiene para intercambio y el bien que otro entrega, en estos casos los valores no se pactan libremente (Mile), son determinado por la presencia del Estado mediante la aplicación de impuestos o tasas, o bien del precio de referencia.
La arrogancia de los economistas socialistas -indica Milei- es creer que al intervenir todos los precios de la economía pueden determinarlos y no es asi porque finalmente colapsan, se contrae la actividad económica y se achica la torta a repartir (cae el PBI per cápita).
La versión socialista es asumirse desde el Estado como omnipresentes y omnipotentes, como si este fuese un Dios, en una arrogancia fatal que conlleva al desastre y destruye el mercado que no es ni más ni menos que el orden emergente de la colaboración social, donde prima la voluntad de las partes en los libres intercambios, sin la intervención del Estado.
En el caso de los Monopolios u oligopolios, recuerdo que en mi carrera universitaria, me los mostraban como los malos de la película, sin embargo Milei indica que el problema es el Estado porque reserva en favor de uno o dos individuos un determinado campo de producción y el resto de la población tiene prohibido ingresar en ese campo, por tanto no hay libertad de precio de los bienes sino una intervención que los determina vía hegemónica (ejemplo: Agua, Energía, Gas Natural, Transportes, Peajes, pasajes de avión, etc.), no hay libre intercambio, hay explotación del hombre por el hombre, mediante la coerción impuesta sobre el intercambio, no hay libertad de elección, no hay competencia. Si el Mercado fuese libre, esto no pasaría.
La presencia de Monopolios, sin intervención estatal genera de una u otra forma mayor riqueza, inversiones en variados campos y mayor empleo en un contexto de entrada/ salida de excedentes crecientes.
Arrogarse el conocimiento del Bienestar General implicaría conocer las preferencia de todos y cada uno de los individuos sobre los bienes de la economía, conociendo la medida justa para determinar una función objetiva y derivar en un equilibrio óptimo, lo cual es caer en la “fatal arrogancia” del economistas Hayek, en relación a que nunca se logro el objetivo deseado, sino que esa prueba de laboratorio con postulados económicos irreales, es el orígen de las catástrofes anteriores y que actualmente sufren todos los Argentinos.
Magíster Jorge A. De Gioia
Nota: Tercera parte en próxima edición