Según nuestro refranero popular en algún momento las promesas incumplidas (o mentiras a sabiendas) se vuelven en contra. Le sucedió hace unos días a un Concejal que esta haciendo campaña para renovar su banca que se vence en 2021, al recorrer Ingeniero Allan y volver a prometer -como hacen todos- lo que no pueden cumplir.
En este caso había prometido, en 2017, dotar de agua corriente a algunas zonas que no la tenían y proveer a algunos vecinos de algunos elementos que necesitaban, con ello logro acompañamiento de varios de ellos para recorrer la zona. Hoy a 2021, los mismos vecinos lo cruzaron en las redes sociales, lo tratan de incumplidor y de olvidarse de ellos desde que asumió como Concejal.
Sus carteles de propaganda política contienen un interrogante ¿hasta cuando?…..buena pregunta para todos los que quieren renovar su banca ¿hasta cuando? van a seguir mintiéndole a la gente, cuando saben que un Concejal no puede realizar ni prometer obra alguna, solo proponerla o pedirla al Ejecutivo Municipal (Intendente).
Deberían mostrar la cantidad de Proyectos que han presentado en los cuatro años de mandato, para que el ciudadano común vea que por lo menos han intentado hacer algo más que cobrar una dieta que hoy día esta en $. 96.000 de bolsillo y según los registros del HCD hay varios Concejales/as que han presentado apenas un proyecto por año. ¿Vale la pena volver a votarlos por otros cuatro años? ……para pensar no les parece.